Mujeres que hicieron historia
Por Marcos Pineda
Aunque por diferentes motivos no se hayan sumado la totalidad de las mujeres mexicanas al paro nacional del día de ayer, las decenas de millones que desaparecieron de la vida pública por un día hicieron historia.
El impacto económico y social, pero sobre todo el hincapié en la demanda de una vida libre de violencia contra las mujeres, han dejado huella. Ahora, lo que sigue es no permitir que los poderes formales y no formales acendrados en un machismo simulador de complacencia y reconocimiento a sus demandas, minimicen y desestimen el alcance que debe tener este movimiento nacional.
Las exigencias de las mujeres no deben de quedar ahí, con el éxito de las mega marchas que pudimos apreciar en los medios de comunicación y las redes sociales, sino trascender en los hechos para que las instituciones responsables de brindarles protección, seguridad y de perseguir y castigar los delitos que se cometen en contra del género femenino funcionen bien y den resultados en el corto plazo.
Los órganos nacionales, locales y municipales cuyo deber es atender los Derechos Humanos, la discriminación y la violencia de género deberían ser receptores permanentes de todas las quejas y denuncias que presenten las agraviadas, ser eficaces para investigar y procesarlas, siendo finalmente sus resultados expuestos al escrutinio público para saber si se está avanzando en la materia con la celeridad y la urgencia que ameritan estos sensibles temas.
La importancia y urgencia de enfrentar la violencia de género salta a la vista en el Estado de Morelos, nada más con revisar los datos del propio secretariado ejecutivo de seguridad pública, que coloca a la entidad en el nada honroso primer lugar en feminicidios del país. La indolencia e insensibilidad del gobierno local debe ser también expuesta por las propias mujeres en todos y cada uno de los casos que ya han sucedido y en los que se presenten, para que las autoridades sepan que estamos al pendiente como sociedad y que no vamos a permitir que le sigan fallando, mintiendo y evadiendo a las mujeres que demanden justicia.
Es cierto que como sociedad tenemos muy poca confianza en las autoridades, sobre todo en las locales, pero también es cierto que si nos sumamos a las mujeres para visibilizar la problemática que enfrentan y evidenciar a los funcionarios públicos que o bien no cumplen con sus responsabilidades o bien son los mismos que generan discriminación y violencia, no tendrán más camino que cumplir con lo que les corresponde o dejar sus cargos.
Para iniciados
A las ya de por sí desgastadas relaciones que sostiene la Sedagro con los productores morelenses, y a los problemas que tiene el gobierno de Cuauhtémoc Blanco, se le agrega la queja que presentó ayer una ex líder sindical quien ha denunciado en la Comisión Estatal de Derechos Humanos una serie de violaciones a sus derechos a lo largo de varios años, que no sólo podrían dar lugar a una serie de recomendaciones a los funcionarios involucrados, sino también podrían hacer que otras trabajadoras se animen a demandar justicia y respeto a los derechos que las leyes les reconocen. Gracias a la pronta y efectiva acción de la CDHMor, que preside Raúl Israel Hernández Cruz, mediante los oficios DQO/399/2020, DQO/400/2020 y DQO/401/2020 serán notificados el gobernador del estado, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación y el director de Enlace Financiero Administrativo del Gobierno del Estado para que un término de 72 horas apliquen las medidas precautorias y suficientes para que se garanticen la igualdad, el trato digno, los derechos a la integridad, la seguridad personal y la protección de la salud, así como el derecho al trabajo que han sido denunciados y documentados por la agraviada. De no tomarse las medidas conducentes y necesarias podrían salir a relucir nombres de actuales y anteriores funcionarios públicos involucrados en este caso.
Excelente martes.
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