INDEPENDENCIA DE MÉXICO: FORTALEZA DE NUESTRA DEMOCRACIA
Por Francisco Hurtado Delgado
Magistrado del Tribunal Electoral del Estado de Morelos
En el marco de la conmemoración de los 209 años del inicio de la Independencia de México, me parece oportuno resaltar que este acontecimiento histórico ha significado un afianzamiento de nuestra democracia y la fortaleza de las instituciones para hacer de nuestra nación un México moderno; si es así vale la pena preguntarse ¿Sí la independencia de México se ha consolidado realmente? O ¿la democracia política que hemos logrado se encuentra a merced de los poderes fácticos?
Es claro que la soberanía e independencia de México se ve permanentemente amenazada por nuestros vecinos del norte, quienes en reiteradas ocasiones han pretendido socabarla a través de sus amenazas de acciones de restricción económica y construcción del muro fronterizo.
Las ideas libertarias de pensadores, principalmente europeos como: Locke, Hobbes, Montesquieu, Rousseau, Adan Smith, Voltairé contribuyeron, en mayor o menor grado con sus teorías y doctrinas, a los movimientos independentistas y revolucionarios. Me parece, que deberíamos continuar ahora en una línea de movimiento cultural e intelectual haciendo uso de la razón como instrumento de análisis para entender y estar en condiciones de resolver los problemas sociales, culturales, religiosos, políticos y económicos de la sociedad y el hombre, pero ahora sin derramamiento de sangre; es decir, una independencia o revolución sin violencia.
México ya no está para conspiraciones y amenazas, nuestro país debe nutrirse con trabajo, desarrollo, lealtad y honestidad en sus instituciones; es por ello que las autoridades autónomas e independientes no deben estar sujetas a ningún ente de poder, más que del pueblo a quien realmente deben servir y proteger.
La justicia electoral debe ser impartida por instituciones verdaderamente comprometidas con la sociedad de donde emana su legitimidad y por la independencia jurisdiccional que significa que los jueces no se encuentran sometidos a ninguna instancia jerárquica, política, administrativa, económica, burocrática o de cualquier orden, pues la esencia del ejercicio de su función es la libertad para actuar, sin tomar en cuenta ningún elemento que no sea la ley tal y como lo refieren nuestras disposiciones normativas.
Refrendar y fortalecer nuestra cultura, nuestra historia, sus tradiciones, sin la influencia y contaminación de un mundo globalizado.
Sentirnos orgullosos de nuestra identidad nacional, de nuestro bello y mágico país, porque ser ciudadano mexicano es un privilegio y un honor, ¡Viva México del alma mía!!!