*Allí fue electo Presidente de la República el General Juan Álvarez
(El autor del presente artículo es el periodistas e historia José Antonio García Bueno; y fue publicado en Semanario “Morelos Universitario” en Julio de 1981)
El Cine Morelos de Cuernavaca está siendo reconstruido para tener una sala cinematográfica en la planta baja y otra en la alta, lo que lo haría doblemente peligroso, ya que el edificio tiene más de un siglo de haber sido edificado, y ya no ofrece resistencia ni seguridad para la vida de los espectadores.
Por el rancio abolengo de esta sala de espectáculos, las autoridades deberían tener más cuidado y prohibir la absurda remodelación.
Seguramente no recuerdan que el Cine Morelos fue transitorio Palacio Nacional y en su recinto fue electo como Presidente de la República el General Juan N. Álvarez, el 2 de octubre de 1855.
El general Álvarez nació de una familia india en 1790, en Atoyac del vecino Estado de Guerrero, y comenzó su carrera militar como soldado raso en 1810, en las tropas del generalísimo José María Morelos, el epónimo de nuestra Entidad.
Dicen los historiadores que fue un jefe astuto y emprendedor poco familiarizado con las costumbres de la civilización, rodeado siempre de sus indios pintos y que no uso nunca otro uniforme que un vestido de lienzo con sombrero de paja.
JUAN ALVAREZ ELECTO EN EL TEATRO DE CUERNAVACA
Cuando su Alteza Serenísima, el jarocho Antonio López de Santa Anna, de infausto recuerdo, tomó el título de Presidente Vitalicio y aspiró abiertamente a formar un imperio, el general Juan Álvarez dio la señal de insurrección en 1854, adhiriéndose y patrocinando el programa político conocido como Plan de Ayutla. Otros jefes siguieron su ejemplo y Santa Anna amenazado por todas partes, se vio obligado a huir en agosto de 1855.
Los principales jefes de la revolución en virtud de un arreglo provisional reconocieron el 16 de septiembre la autoridad superior del general Juan Álvarez, que eligió a Comonfort a su primer teniente.
Cuando triunfó la revolución, Álvarez, a la cabeza de sus soldados, emprendió la marcha hacia la capital del país, llegando a Cuernavaca el primero de octubre de 1855 y al día siguiente lanzó un manifiesto explicando las maniobras del Partido Conservador para aprovecharse del triunfo revolucionario.
Enseguida, designó una junta encargada de elegir Presidente de la República. Dicha junta se instaló en el Teatro Cuernavaca (actual Cine Morelos), presidida por Valentín Gómez Farías.
En la votación resulto electo Presidente Interino de la República, el general Juan Álvarez, quien designó aquí mismo en Cuernavaca a los miembros de su gabinete presidencial: Melchor Ocampo, Ministro de Relaciones; Benito Juárez, de Justicia; Guillermo Prieto, de Hacienda; e Ignacio Comonfort, de Guerra.
El cuerpo diplomático acreditado en México, vino a felicitar al nuevo jefe de la Nación, general Juan Álvarez y, por consiguiente, el hoy Cine Morelos fue transitorio Palacio Nacional y Cuernavaca, la capital del país, durante la permanencia del general Juan Álvarez y su gabinete.
PERO EL CINE MORELOS ESTÁ SALADO
Allá por 1870, existía la Plazuela de San Pedro, sobre la que se levantaba el templo dedicado a ese santo; pero el general Francisco Leyva, que fue el primer gobernador que tuvo el naciente Estado de Morelos, mandó demoler esa iglesia para edificar en su lugar el Teatro Ruiz de Alarcón (hoy Cine Morelos), lo cual indignó a las viejas beatas que pregonaban que “ese lugar de perversión estaría salado y maldito”.
El 5 de mayo de 1872, es decir hace más de un siglo, el gobernador Francisco Leyva inauguró el Teatro Ruiz de Alarcón.
La maldición de las viejas beatas se convirtió en dolorosa realidad, pues el “salado” Teatro Ruiz de Alarcón se incendió el 12 de diciembre de 1875, muriendo en la chamusquina “como setenta espectadores”. Para el 14 de febrero de 1881, el gobernador Carlos Quaglia, colocó la primera piedra de la reconstrucción del incendiado teatro y dirigió las obras el arquitecto Domingo Nandín. Buena parte del dinero invertido en esta reconstrucción, la donó el Presidente de República, general Porfirio Díaz, por lo que los lambiscones de la época le impusieron a la nueva sala de espectáculos el nombre de Teatro “Porfirio Díaz”, que se estrenó el 5 de febrero de 1882.
El 14 de septiembre de 1933, el gobernador de Morelos Vicente Estrada Cajigal, rebautizó el local con el nombre de “José María Morelos”.
El teatro-cine fue por varios lustros propiedad del Estado, hasta que cierta persona, cuyo nombre prefiero omitir, lo malbarató como si fuera suyo y no patrimonio del pueblo morelense y lo vendió a una empresa que se ha enriquecido explotándolo para su provecho.
Pero la maldición de las viejas beatas de 1870, no se había extinguido aún, ya que un infausto día que los morelenses recordamos con tristeza, no menos de 16 niños murieron horriblemente pisoteados en el “salado” Cine Morelos de Cuernavaca, que antes, como ahora, jamás ha tenido salidas de emergencia.
Ojalá que los actuales dueños del Cine Morelos, lean su historia para que no se repita, y tengan respeto para el lugar, que un día, el 2 de octubre de 1855, fuera pasajero Palacio Nacional de México para elegir al Presidente de la República, general Juan Álvarez.
José A. García Bueno.
