El diputado Carlos Alaniz acusó a la Dirección de Gobernación del Ayuntamiento de Cuernavaca de extorsionar de manera constantes a los pequeños comerciantes establecidos de la ciudad.
Precisó que los supervisores extorsionan a los vendedores mientras que sus superiores continúan haciendo oídos sordos a las quejas que han presentado los afectados, en tanto que otros optan por callar ante el amago de sufrir un cierre definitivo a su única fuente de ingresos.
“Cada vez son más las quejas que estamos recibiendo como representantes populares por el actuar de los supervisores de Gobernación municipal, principalmente de las colonias de la periferia, donde nos dicen que han intensificado su campo de acción para obtener dinero que no llega a las arcas municipales’.
Expuso que, de acuerdo con los quejosos, los supervisores aprovechan la falta de algún documento o de la licencia de funcionamiento o del refrendo para solicitar dinero que va desde los 500 pesos en adelante, de acuerdo con el giro del negocio, y les dan una semana para ponerse al corriente, y así cada semana, incluso a algunos comerciantes les dan el beneficio de pagar la extorsión oficial hasta en 2 o 3 pagos.
“También existe el silencio de sus jefes e incluso de la Contraloría municipal, quienes hasta el momento no han dado a conocer el número de quejas y/o denuncias que tienen contra estos servidores públicos, que más bien se están sirviendo de la población para obtener dinero de manera ilícita, como tampoco el número de procedimientos administrativos que han iniciado y cuántos supervisores han causado baja por esta causa, por lo menos para inhibir esta práctica que lastima a los pequeños comerciantes”, refirió el legislador Alaniz Romero.
Agregó que otro tema similar se tiene con los supervisores de la Secretaría de Desarrollo Sustentable de la comuna, pues líderes del comercio establecido se han acercado con él para dar cuenta de los abusos de que han sido objeto, incluso llegando a la clausura o suspensión de actividades, pidiendo documentación que al momento de iniciar operaciones no era necesaria, algunos con hasta 30 años de estar funcionando, lo que dijo, en los próximos días dará a conocer a detalle, para pedir a las autoridades municipales poner freno a los abusos.
“Las autoridades del gobierno de Cuernavaca están pasando por encima de los derechos de los comerciantes, lo que tendría como resultado el cierre de negocios, el freno a nuevas inversiones y la pérdida de empleos, por lo que pido a los ciudadanos a que denuncien estas anomalías, no sólo ante el Ayuntamiento, sino ante otras instancias, pues muchos ya no confían en la instancia municipal”.
